Compartimos lunas y soles...alboradas ...atardeceres
cubrimos con un manto de amor y de ternura nuestros seres...
palpitar a palpitar nuestros sentidos...
por todo esto...tanto...cuanto...mucho más.
Al rondarte los pensamientos...el aroma de mi esencia tu respires....
el silencio hablara por mí...piénsame dulcemente.
EMPRENDE TU VUELO
Emprende tu vuelo cuando llegue invierno
el viento derramé las hojas del cedro
el mirar seduce en baile de amores
ramajes desnudos, hojas enamoren
escarchen sentidos, calienten mi lecho.
Amor
emprende tu vuelo en invierno
los copos de nieve con blancos ropajes
cubran con su manto,campiñas y valles
las ramas desnudas del cedro
señales te digan ternuras de amores
un nuevo sendero
Cuando llegue el tiempo emprende tu vuelo
las hojas enciendan, calienten mi lecho
guarden los sentidos
dormiré desnuda el soñar eterno.
Beatrice
( Si por azares de la vida....un día cualquiera tu mirar se deslice en estas líneas...
en murmullo el eco de mi voz escucharas...
no te alejes...no te vayas....espera a conocerme...
enamorate de mí... )
Si fuera yo, te diría que te amo, que conservo tus esencias en lo más profundo de mi corazón, y que con ellas recito mi canto a la vida. Y te diría también que sin tu presencia (que es mucho más que ausencia) me agito sin remedio en un mar revuelto, que hace de mí un naufrago perdido. Mis pasos se vuelven inciertos y mi brújula se desorienta.
ResponderEliminarPero no puedo ser yo si, por ser yo, quiebro tu animo. Y no puedo acercarme a tu jardín, si termino por convertirlo en un páramo donde solo el desierto y la arena tienen su sitio.
La cordura y la responsabilidad me reclaman el silencio.
En estas manos, tan ardorosas como torpes, habita ese avecilla que hace de su corazón un puerto en el que se hace difícil no recalar... que lleva en el alma el blanco de su pureza y de su libertad...
ResponderEliminarEn estas manos, tal vez indignas, habita ese avecilla cuyo canto nunca me dejará de subyugar...